En invierno, la cara y las manos son las zonas que suelen estar más tiempo expuestas a las bajas temperaturas o al viento y no siempre están protegidas, especialmente el rostro. Además, es común relajarse y no cuidarse tanto como en las estaciones más calurosas, lo que abre la puerta al envejecimiento prematuro de la piel.
Los cambios bruscos de temperatura, sumados al viento y la contaminación, son agentes externos que agreden la piel y provocan que se inflame, se agriete o pierda elasticidad. Por ejemplo, salir a la calle desde un lugar temperado castiga las defensas naturales de la piel y provoca que su capa superficial se deshidrate. Pero, además, hay muchos otros factores que hacen que la piel se seque con facilidad: la calefacción, la contaminación, el viento frío, los aires acondicionados con bomba de calor, etc.
Estos condicionantes pueden ensuciar nuestra piel, taponar los poros y reducir su oxigenación. Pero, ¡no te preocupes! Hoy te traemos un gráfico con los mejores consejos para cuidar tu piel en invierno. En primer lugar, es importante que hidrates la piel a diario y, bastante a menudo, con un emoliente adecuado como lanolina o urea. En segundo lugar, vale la pena evitar baños con agua muy caliente o demasiado fría. Otro aspecto importante es no olvidar las gafas de sol y la protección solar diaria, no solo en lugares donde haya nieve.
Por lo que respecta a los labios, resulta también esencial hidratarlos y protegerlos de la luz ultravioleta. Finalmente, debemos subrayar la importancia del consumo de vitamina C y de antioxidantes, así como beber al menos dos litros de agua al día.
[caption id="attachment_4224" align="alignnone" width="1240"] protege tu piel del frio[/caption]